19 de abril de 2009

TECHY

Hace casi tres meses en la ciudad de Tarapoto una horda de energúmenos dio una salvaje paliza a una travesti y su cliente que estaban practicando la prostitución callejera en la modalidad del "pelaplátanos". Tercero Tananta Pizango "Techy" fue rapada, golpeada y paseada por las calles por los miembros de la junta vecinal de la localidad:



El escándalo suscitó una ola de solidaridad única. Mil y un organizaciones GLBT del Perú y del extranjero se pronunciaron (deporte favorito -y único- de la mayoría de estas ONG) por que se haga justicia a la compañera agredida. Poco faltó para que se armaran marchas o plantones de protesta. La abogada y activista del movimiento lesbico-gay-trans peruano Susel Paredes informó que la Fiscalia Mixta de Tarapoto formalizo la Denuncia Penal contra los agresores Huxton Valdivia Barrera, Carlos Arce Ríos y Edinson Dávila.

La pregunta del millón es si realmente se estará haciendo "justicia" o no. Ello implica que ambos lados del problema tomen conciencia de su cuota de responsabilidad. Los vigilantes la deben tener clara pues están siendo encauzados por ello. Pero ¿la parte de Techy?

Si bien es injustificable el salvajismo de esa "justicia" callejera, no menos lo es la práctica de Techy. Eso de hacer faena en la vía pública es degradante no solo para el vecindario sino para la propia víctima y cualquiera con un mínimo de autorespeto.

Pero no olvidemos que la inmensa mayoria de travestis en provincia viven en la marginalidad. En las regiones selváticas aunque es más abierta la cosa, no es menos marginal. Delincuencia, prostitución y otras perlas son parte de la vida de estas personas. Por si fuera poco la ciudad de Tarapoto es uno de los puntos calientes de la prostitución infantil y el trafico sexual en la selva peruana.

¿Cuánta de toda la "solidaridad" estará dirigida a atender esa realidad? Para informarme he tenido que revisar las noticias y pronunciamientos de hace más de 2 meses que se basaban únicamente en el reportaje televisivo mostrado arriba. De ahí no hubo cobertura alguna hasta principios de abril con la formalización de la denuncia. Después de eso, nada.

Lo que pude averiguar de otras fuentes es que Techy volvió a las andadas y fue detenida nuevamente -pero sin violencia- en la misma situación. La denuncia al parecer quedó en nada y todo volvió a la "normalidad". Algo consignaron los medios tarapotinos y fue la frase que soltó Techy (muy suelta de huesos dicen) al caer de nuevo: "Que quieren que haga si así es mi vida".

No hay comentarios.:

Publicar un comentario