27 de abril de 2007

UP TO DOWNTOWN

Acaban de cerrar Downtown - Vale Todo (sic) y no se si volverá. Si acaso reabre espero que sea de forma "discreta", a ver si vuelve a ser como era hace no pocos años que comenzó como un local friendly y "nadie se metia con nadie" por decirlo de alguna forma. No era asidu@ del local pero las veces que caía con algunos amigos a la salida me quedaba con alguien a caminar y conversar por los malecones. No crean que terminábamos en telo siempre, por si acaso. Ya saben: soy tranki. ;)

Ahhh tiempos aquellos como dicen las viejitas. Pero de repente DT se convirtió en un point "popular" y empezaron a aparecer ciertas especies: snobs, figuretis, "curiosones", etc. En esos nuevos comienzos, tuve un incidente con un tipo atorrante que se computaba "joven empresario" (asi se presentaba!) que terminó casi persiguiéndome dentro diciendo "Ya peee cholita!!". Ignoramus.

Pero la gota que derramó el vaso fue cuando empezaron los tumultos para entrar y tenías que soportar a toda clase de gente, incluso choros con guante de seda. Y si protestabas te callaban diciéndote "no seas escandalos@", por joder. Para cualquiera esto era señal de que las cosas no mejorarían sino todo lo contrario; y no porque se trate del ambiente gay, sino porque el lugar se estaba contaminando con los usos y costumbres de otras discotecas tipo Retablo o Carretera Central.

Yo me pregunto ¿que defienden exactamente personajes como Coco Marusix o el Hijo de Ferrando (con el respeto que se merecen)? Como se comentaba en un post de la excelente pagina Utilísimos, hay un problema de fondo y que pocos se atreven a tocar: los empresarios discotequeros. Con tal de ver billete por cantidades, les "vale todo".